sábado, 21 de septiembre de 2019


EL DIARIO DE UNA GITANA: HOY LA HISTORIA DE ROMY Y SILVIO: CAPITULO “LA LLEGADA DE UN RAYITO DE LUZ”
    Buenas y santas diría un paisano que me visita ,mientras el duende que me trae historias de la niña  que revolea el poncho me apura ansioso, pues me trajo un regalo de algún lugar.
Entonces preparo mis amargos tradicionales y pongo al azar como un capricho del destino quizás, que suene lo primero que quiera y que me vaya a acompañar, y suena como un presagio de esta historia “Rayito de luz” de mi querida Soledad.
   Hoy les traigo un capítulo más de la historia de amor de Silvio y Romy, dos seres de otro planeta que como ya les he contado en otras ocasiones tuve la suerte de cruzar, y que suelen aparecer en mis líneas porque aun sin vernos seguido, cada vez que me toca ir detrás de la Sole de alguna manera ellos están.
  Y si les tengo que contar como llego a mí la noticia de la protagonista de mi historia hoy voy a usar las palabras de mi amigo el gran Silvio como lo llamamos por acá, ya que un día charlando de otras cuestiones recibo un audio, que mientras escucho alcanzo a percibir justo lo que sale del alma misma de su dueño, ya que me cuenta emocionado que junto a su compañera Romy van a ser papas.
  En ese momento sentí la emoción como cada vez que uno de los míos me da la noticia de que voy a ser tía una vez más, y agradeciendo a mi amigo por haber sido una de las pocas privilegiadas para conocer la noticia me despido con una inmensa alegría y olvidándonos de el motivo que nos llevó a hablar ese día.
  En casa de herrero…cuchillo de palo dicen por acá, así es que si bien las computadoras invaden mi vida y mi mundo, yo nunca suelo aconsejar el uso diario de las redes sociales y esas yerbas, A mi caeme por casa y decime: chamiga hacete pue un mate y charlemos un rato que hay algo que te quiero contar. Entonces entre mates, risas y un cielo de mi lugar en el mundo que pa que les cuento ,se dan esos momentos que yo guardo tan celosamente en mi corazón.
Sin embargo se cuan importantes son, en casos como estos,  cuando esas personas especiales que uno va queriendo en su loco andar detrás de Soledad están a unos cuantos km. De distancia.  Para estos casos la tecnología es mi aliada, y cuando me animo con mucha fiaca, a revisar mis redes sociales, la primera imagen que se asoma es la de dos personitas que se miran el uno al otro, enamorados sin dudar, ajenos al universo, solo pendientes el uno del otro, con un lazo inexplicable al resto de los mortales; la imagen de un rayito de luz, conociendo  a su papa.
Entonces es que entiendo todo de nuevo, parece que decidió venir al mundo, una princesita de cuento de hadas llamada Natalia Soledad.
Mis amigos son dos seres increíbles, y si bien Silvio es el mas charlatan de la pareja, yo suelo decirle desde siempre que la gran leona en ese amor es sin duda alguna Romy Namor, una piba dulce, de un corazón noble y gigante, pero con la fortaleza de un huracán, que protege a su amor , ya que mi amigo conserva de a ratos esa inocencia intacta, de un gaucho de por acá, y que a veces hace que le juegue alguna que otra mala pasada. Sin embargo ahí está ella, incondicional, y hace rato que escriben una bonita historia, que hoy suma otro capítulo más.
Esperando el tiempo prudencial, me comunico con mi amigo, les dejo un mensajito de alegría por la llegada de su niña, mientras mi vida por mi lugar en el mundo sigue casi sin protestar. Para mi sorpresa, al día siguiente, otra vez de la mano de la tecnología que tantas veces me gusta dejar de lado, me trae un mensaje que arranca con un :”Hola tia bety”, para después dar paso a un gaucho que mientras lo escucho hablar, me deja percibir todas esas cosas que le pasan  por el alma misma, mientras me cuenta de como esta Romy, de su beba, de como fue todo el proceso del nacimiento de Natalia Soledad. Y es que el gaucho misionero que yo tanto quiero y admiro es así ;me habla de la valentía de su china, de la sensación inexplicable que es transformarse en papas, de ese nuevo sendero que a partir de ahora empiezan a transitar. Y es que la vida no vino con un librito que nos enseñe a ser papas vio? Eso es como dice un poeta “ se hace camino al andar”.
Entonces una vez más la pibita que revolea el poncho, y esa magia que cobra vida, cada vez que coincidimos detrás de ella, hoy de nuevo se posa en esta charla, porque si hay alguien que tiene mucho que ver con la historia de amor de Silvio y Romy, es sin duda Soledad.
Silvio habla y habla, y su voz pasa por todas las emociones juntas. De pronto siento ese nudo en la garganta en su voz, que ya la he visto una vez, mirándolo a los ojos, cuando hablábamos de esta amistad rara que tenemos a través de la gringa, y al siguiente instante se ríe feliz mientras me cuenta con detalles todo lo ocurrido.
Después me dice, sabes bety, la llegada de nuestra hija, fue mágica, desde el principio, porque vino en el momento indicado, si bien la soñamos, la planificamos y la deseamos tantas veces, ella decidió el momento de llegar a nuestras vidas. Me habla del amor por los sobrinos de ambos, pero me dice emocionado una vez más: nada se compara con esto, es algo que no se explicar, es como si me brotara aún más adentro del alma, es un amor gigante que crece cada día un poquito más. Yo conozco ese sentimiento, hace 19 años me lo regalo una guainita que hoy ya me hizo abuela, entonces puedo entender de que hablan mis amigos.
A su lado su niña, cuida atenta, a su papa, en brazos de una leona, ajena a todas estas cuestiones tontas de los grandes, disfruta de su mamá, mientras mi amigo aún busca las palabras para describir este sentimiento tan lindo que se siente al ser papas.
Romina aparece de a ratos, con algún que otro detalle que se le olvida a Silvio, que apurado por contar todo lo lindo que esta viviendo, suele dejar pasar, pero la mirada de Romy con la maternidad, y su historia de amor con su niña, es algo que voy a dejar para un capítulo especial cuando ella decida contármelo, y si me lo deja publicar.
Silvio recuerda de pronto alguna que otra adversidad que antecede a la llegada de su hija, pero dice convencido, por algo Dios quiso que así sea, y hoy me premia sin dudarlo con una princesita que vino a este mundo a darle un nuevo matiz. Entonces nos enfrascamos en una charla de pañales, de andanzas de niños, de canciones de cuna y un montón de cosas más, y por ahí cuando yo le cuento que mi Nicolas, ni bien escucha una chacarera se pone a bailar,de pronto se frena y tira un deseo al aire: “que bonito bety, algún dia yo voy a poder bailar una chacarera con mi hija”.
No tengo dudas de eso querido amigo, como tampoco que esta niña va a seguir el camino de sus padres, y la vamos a ver girando detrás de Sole, en algún que otro festival. Natalia Soledad, como no podía llamarse de otra manera vino a este mundo a enseñarnos que hay un amor aun mas alla y que por mas que le inventemos palabras no lo vamos a poder explicar. Tiene más tíos que días de vida, dispersos por todo el país, cada uno de los que conocemos a Silvio y  a Romy y que nos permiten conocer su historia nos sentimos un poquito parte de ella, y decimos orgullosos que una nueva lucecita hoy arranca su historia, acompañada de sus papis, detrás de la chica que revolea el poncho, de aquella niñita santafesina que se llama Soledad.
Me despido de mi amigo Silvio que sigue sin poderme explicar, mientras en mi cabeza, sin que yo lo pueda evitar, las palabras me nacen sin freno, y necesito sentarme a plasmarlas y compartirlas con ustedes una vez más. Y es que hace tiempo que el duende que me cuenta historias del mundo de Soledad, se me hacía esquivo y no me venía a visitar. Me guardo sin duda algunos detalles que son míos de puro gusto nomas, y cuando les muestro el borrador a mis protagonistas, Silvio me cuenta que el nombre de la niña fue en honor a Sole y Naty, y es el fruto de todo lo que ellas sembraron en ellos. Me regala un párrafo aparte ,mientras me cuenta con palabras lo que ya me dejo ver a través de su alma ,que aman inmensamente a su pequeña y que agradecen de la misma manera a todos los amigos que estuvieron y están a su lado, personas que para el son familia y así los vuelve a homenajear.
La madrina de Natalia es una amiga de Silvio, que conoció a mi amigo aun antes que Romy llegue a sus vidas, y que por esas cosas mágicas del destino y de Soledad hoy es una de las amigas más cercanas a Romy, tal es así que es además testigo de la boda de los chicos.Gisela Peralta se llama y ya lo creo que tiene historia, si algún día quiere contar.
La yapita que me dejo para el final tiene que ver esta vez con la reacción del gaucho misionero cuando lee mi borrador: siempre digo lo mismo de Silvio y todos los que lo conocen van a coincidir seguramente conmigo: emocionado me dice” pucha bety que se me salta alguna que otra lágrima mientras leo tus líneas, algo que hasta ahora no había podido soltar”. Créanme amigos que es el mejor pago para quien les escribe, si con unas simples palabras logro llegarle al corazón.

 Ya lo creo guainita linda que viniste a este mundo a revolucionar, pienso yo mientras termino mis líneas y me despido hasta la próxima, seguramente con alguna que otra historia de esas que todos disfrutamos y que alguien se anime a contar, mientras suena de fondo cantando, despacito y casi en un susurro una versión acústica de la abuela Emilia, en voz de Soledad.
    Hasta la próxima chamigos
                           ¡ La tia Bety de Mocoretá!